LHASA, 28 mar (Xinhua) -- Qizhala, presidente del gobierno de la región autónoma del Tíbet, en el suroeste de China, pronunció hoy sábado un discurso televisado para celebrar el Día de la Emancipación de los Siervos.

Hace sesenta y un años, más de un millón de personas, aproximadamente el 90 por ciento de la población de esa zona en aquel entonces, fueron liberadas de la servidumbre feudal.

"Los enormes cambios que han tenido lugar en el Tíbet en las últimas décadas han demostrado las fortalezas institucionales del socialismo con peculiaridades chinas, el calor de la patria como una gran familia y que el futuro y el destino del Tíbet están estrechamente vinculados con la patria", manifestó el funcionario.

Agregó que el producto interno bruto de la región se disparó a más de 160.000 millones de yuanes (unos 22.700 millones de dólares) el año pasado, unas 206 veces más que en 1951.

En 2019, el ingreso disponible per cápita de los residentes urbanos fue de 37.410 yuanes y el de la población rural alcanzó los 12.951 yuanes.

En ese periodo, el Tíbet básicamente ha erradicado la pobreza absoluta y todos los distritos han sido eliminados de la lista de la pobreza.

Además, la esperanza de vida promedio de las personas en la región aumentó de 35,5 antes de 1959 hasta 70,6 en la actualidad.

"En la actualidad, China está luchando contra el nuevo coronavirus. Nosotros continuaremos llevando a cabo medidas de control y prevención, acelerando la reanudación del trabajo y la producción, garantizando el empleo y manteniendo un buen impulso del desarrollo económico y social", aseguró el funcionario.

Al mismo tiempo afirmó que este año, la región continuará mejorando el desarrollo de alta calidad, elevando el nivel de vida de las personas y construyendo un hermoso Tíbet.